A principios de verano, fuimos testigos de la llegada a nuestra comunidad de un nuevo rector, no era para nosotros una persona desconocida, ya que más de una vez habíamos entablado animosa conversación con D. Tomeu Tauler, un afable felanitxer, rector de la parroquia de San José Obrero. Pero hete aquí que Tomeu no viene solo, sino que le acompañarán D. Manolo Montero y D. Carlos Norberto como vicarios. Además de esta figura desconocida por la mayoría, la del vicario, que iremos conociendo sus funciones con el tiempo, fueron portadores del nuevo sistema de gestión que se irá implantando en la mayoría de las comunidades parroquiales con el tiempo: “la UNIDAD PASTORAL”.
¿Qué significa eso de la unidad pastoral?, siendo muy breve es algo muy parecido a lo que vivimos hace años, con la llegada de D. Toni Boned a Corpus, “el sector parroquial”, en la que las parroquias de Corpus Christi, Mare de Déu de Montserrat y San Vicente Ferrer, compartían recursos y se realizaban actividades conjuntas. Ahora bien, la mayor diferencia estriba ahora mismo, en que las comunidades de Corpus Christi y San José Obrero compartirán los sacerdotes, debido en parte ante la escasez de sacerdotes y sobretodo, a la necesidad de unir comunidades pastorales vecinas, que en sinergia pueden ver ampliados sus recursos, tanto de materiales como personales.
No se trata de una absorción al estilo de una OPA al uso entre empresas, sino que dos comunidades vecinas empiecen poco a poco a trabajar conjuntamente en pos de una labor esencial: la evangelización del entorno donde nos movemos.
Quisiera aprovechar desde estas líneas, a invitaros a compartir esta experiencia conjunta, a ser solidarios, a compartir y a recibir las vivencias de nuestras comunidades, y extender esta invitación, a las diferentes comunidades de inmigrantes que viven en nuestra barriada, a hacerlos partícipes de la vida de nuestra comunidad.
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